La neuropsicología es una especialidad perteneciente al campo de las neurociencias, que estudia la relación entre los procesos mentales y conductuales y el cerebro. Constituye un punto de encuentro entre la psicología y la neurología.
En los últimos años ha recibido un renovado impulso del creciente desarrollo de las ciencias cognitivas (psicología cognitiva, inteligencia artificial, lingüística), de las ciencias neurobiológicas (neuroanatomía, neurofisiología, neuroquímica) y de la explosión tecnológica con las técnicas de neuroimagen (en particular la resonancia magnética, la tomografía por emisión de positrones o PET, el mapeo cerebral y la resonancia magnética funcional).
Un neuropsicólogo se ocupa entonces del diagnóstico y el tratamiento de aquellos problemas cognitivos, conductuales y emocionales que pueden ser resultado de diferentes procesos que afecten el normal funcionamiento cerebral.
El Dr. Marcos Ríos Lago, reconocido neuropsicólogo nacional e internacionalmente, explica muy bien en este corto vídeo realizado por la UOC qué es la neuropsicología, qué hacemos y cómo trabajamos.
La evaluación neuropsicológica o neurocognitiva es un método diagnóstico que estudia el funcionamiento cerebral y permite al médico y a otros profesionales de la salud comprender cómo funcionan las diferentes áreas y sistemas del cerebro de un paciente a través de la medición de sus capacidades cognitivas. Habitualmente se recomienda la realización de dicha evaluación cuando existen síntomas o quejas relacionados con la memoria, la atención, el lenguaje o el razonamiento.
Habitualmente se recomienda la realización de dicha evaluación neuropsicológica cuando existen síntomas o quejas relacionados con la memoria, la atención, el razonamiento u otros aspectos relacionados con las funciones cognitivas. Algunos signos que requieren una evaluación cognitiva son cambios en la concentración, la organización, el razonamiento, la memoria, el lenguaje, la percepción, la coordinación o la personalidad. El cambio puede deberse a cualquiera de muchas causas médicas, neurológicas, psicológicas o genéticas. Las pruebas o estudios que se realicen serán útiles para entender la situación específica de cada paciente.
Como característica general, la evaluación puede ayudar a identificar debilidades en áreas o funciones específicas (problemas de memoria vs problemas de atención, por ejemplo). La evaluación neuropsicológica permite también clarificar las causas de un trastorno cognitivo dado (p.ej. depresión u otro trastorno emocional-conductual vs. patología cerebral) así como también para identificar problemas asociados con enfermedades médicas que pueden afectar el funcionamiento cognitivo general, como la diabetes, las enfermedades metabólicas o infecciosas, o el alcoholismo.
Es especialmente útil para identificar la presencia y naturaleza de trastornos cognitivos precoces o leves. Tiene una gran sensibilidad para detectar problemas leves de memoria que de otra manera podrían no ser obvios. Muchas veces, cuando los problemas son muy sutiles, la evaluación neuropsicológica es la única herramienta que permite detectarlos. Por ejemplo, el perfil neuropsicológico puede ayudar a determinar si los cambios de memoria son cambios normales debidos a la edad, o son más bien el reflejo de un trastorno neurológico. Así mismo, cuando se diagnostica una demencia, el perfil neuropsicológico permitirá tipificar si se trata de una enfermedad de Alzheimer, una demencia frontotemporal, una demencia vascular, etc.
Los resultados de las pruebas también pueden servir para ayudar a distinguir entre diversas enfermedades, lo cual es importante porque el tratamiento apropiado depende de un diagnóstico preciso. Diferentes enfermedades darán como resultado diferentes patrones de puntos fuertes y débiles en las pruebas. Por lo tanto, los resultados pueden ser útiles para determinar qué áreas del cerebro podrían estar involucradas y de qué enfermedades podría tratarse. Por ejemplo, las pruebas pueden ayudar a diferenciar entre la enfermedad de Alzheimer, un accidente cerebrovascular y una depresión.
El desempeño de un paciente en las pruebas puede servir para planificar tratamientos, tomando como base los puntos fuertes para compensar las debilidades. Los resultados ayudan a identificar qué problemas deben ser los objetivos del trabajo y qué estrategias hay que usar. Por ejemplo, los resultados de las pruebas pueden ayudar a planificar y monitorizar la rehabilitación o a realizar el seguimiento de la recuperación de destrezas después de un accidente cerebrovascular o de un traumatismo craneoencefálico.
Los estudios han demostrado cómo las puntuaciones en pruebas específicas se relacionan con algunas capacidades de funcionamiento en la vida cotidiana, como administrar el dinero, conducir o estar en condiciones de retomar el trabajo. Los resultados de una evaluación neuropsicológica ayudarán a entender y anticipar qué problemas podría tener el paciente en su vida diaria y tomar las decisiones más acertadas.
La rehabilitación cognitiva es un método terapéutico destinado a mejorar o compensar los déficits neurocognitivos producidos por procesos que afectan el normal funcionamiento cerebral. Está indicado para aquellas personas que han sufrido cambios en su capacidad de recordar, concentrarse, pensar, hablar con fluidez, razonar, resolver problemas, organizarse, etc. debido a múltiples condiciones: traumatismo craneoencefálico, epilepsia, enfermedad de Alzheimer, accidente cerebrovascular, demencias, esclerosis múltiple, TDAH, depresión, trastornos del desarrollo, esquizofrenia etc.
Todas aquellas personas que hayan experimentado cambios en su capacidad de recordar, concentrarse, pensar, hablar con fluidez, razonar, resolver problemas, organizarse, etc. debido a múltiples condiciones: traumatismo de cráneo, epilepsia, enfermedad de Alzheimer, accidente cerebro-vascular, esclerosis múltiple, ADHD, depresión, esquizofrenia etc.
También aquellas personas que encuentran que su funcionamiento cotidiano ya no es el mismo que antes, y que se quejan de olvidos y distracciones frecuentes (sin que esto se deba a causa orgánica alguna) también pueden beneficiarse de la estimulación cognitiva, a través del entrenamiento cognitivo (con actividades que desafíen y mantengan sus capacidades cognitivas), la internalización de estrategias y la adquisición de hábitos que mejoren su calidad de vida.
Los programas de estimulación y rehabilitación cognitiva no tienen efectos secundarios ni adversos.
A partir de una evaluación neuropsicológica y del perfil neuropsicológico que se obtiene de ella, se diseña un plan de tratamiento que apunta a la rehabilitación y estimulación de las funciones que se encuentren afectadas.
En nuestra consulta, el tratamiento incluye la asistencia a los consultas y también tratamiento a distancia mediante recursos online específicos para cada paciente particular. El tratamiento puede ser llevado a cabo de manera individual, grupal o la combinación de ambas.
La rehabilitación neuropsicológica o cognitiva tiene su fundamento en dos conceptos básicos de las neurociencias: la neuroplasticidad y la reserva cognitiva:
¿Qué es la Neuroplasticidad?
En términos coloquiales puede definirse a la neuroplasticidad como la capacidad de cambio que posee el cerebro a lo largo de la vida. Contrariamente a lo que se creía antiguamente, el cerebro tiene la sorprendente capacidad de reorganizarse creando nuevas conexiones entre las neuronas.
¿Qué es la Reserva Cognitiva?
El concepto de reserva cognitiva hace referencia al rol protector que poseen la educación y las actividades intelectuales que practique un sujeto en relación a la manifestación de la patología cognitiva.